Terapia Ortomolecular: El tratamiento de vitaminas de moda entre las famosas



La Terapia Ortomolecular es un tratamiento que últimamente está muy de tendencia entre celebs como Rhianna y Kelly Osborne. Y si bien en Chile todavía no es bien conocida, ya hay conocidas que se someten a este tratamiento, como la modelo argentina Vanesa Borghi, a quien acompañamos a una de estas sesiones para poder ver de qué se trata.

Unas lo utilizan como un tratamiento energético y otras como un tratamiento integral para progresar la salud, mas ¿Qué es la terapia Ortomelecular? ¿Cuáles son sus beneficios? ¿De qué manera aplicarla adecuadamente? ¿Cuáles son sus riesgos? Charlamos con especialistas en alimentación. Y Aquí te contamos qué nos afirmaron.

¿QUÉ ES LA MEDICINA ORTOMOLECULAR?
El término Medicina Ortomolecular fue creado en mil novecientos sesenta y nueve por Linus Pauling, premio Nobel de Química y premio Nobel de la Paz. Pauling fue uno de los primeros en describir la estructura del ADN y definió la medicina ortomolecular como una forma de “preservar la salud y tratar enfermedades administrando la cantidad perfecta de moléculas que son precisas para el organismo”.

Conforme explica la doctora Elisa Cáceres, especialista en medicina interna y en medicina ortomolecular de la Clínica de Salud Integral Yaisi Picrin, la terapia ortomolecular busca compensar las moléculas del organismo. Para esto la terapia consiste en “sacar lo que sobra y restituir lo que falte, a fin de que vuelvas a marchar como debes funcionar”, explica.

En el fondo primero se efectúa un diagnóstico de los minerales, nutrientes y metales que tiene el organismo por medio de una muestra de pelo, orina y sangre. Entonces, por medio de un proceso de quelación, el paciente empieza un proceso de desintoxicación y por último se restituyen los nutrientes que hacen falta en el organismo mediante inyecciones o bien tratamientos endovenoso con altas concentraciones de vitaminas y minerales, precisos para cada paciente.

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¿PARA QUÉ SIRVE?
Conforme explica Cáceres, esta terapia sirve tanto para un tratamiento nutritivo metabólico para inconvenientes más complejos de la salud. “Este tratamiento robustece tu sistema inmune”, explica. Al tiempo, la doctora añade que el fin primordial de este tratamiento es la salud, mas que a consecuencia del mismo, se consiguen beneficios de belleza puesto que, “si todo está marchando bien desde adentro, todo se marcha a expresar para afuera”, afirma.

“Hay bastantes personas que vienen acá buscando un cuerpo perfecto, verse joven o bien bajar de peso. Nosotros hacemos un tratamiento completo donde, se crea un plan nutricional y se complementa con el equilibrio molecular. Es un tratamiento integral”, explica Cáceres.

¿QUÉ ENFERMEDADES PUEDE TRATAR?
1. Enfermedades relacionadas con el sistema inmune
La terapia robustece el sistema inmune a fin de que cualquier enfermedad producido por una falla del sistema, desaparezca. Además de esto, reduce el dolor y mejora la movilidad de enfermedades del sistema conectivo como el lupus y la artritis reumatoide.

dos. Cáncer y esclerosis múltiple
Conforme la experiencia de Cáceres los pacientes con cáncer consiguen robustecer el sistema inmune y eso les deja resistir las quimioterapias y la enfermedad generalmente. “No es que suprima la enfermedad, sino robustece el sistema inmune para combatirla”, resalta y aclara que lo que busca asimismo es reducir los dolores para hacer las enfermedades más soportables.

En el caso de la esclerosis lateral amiotrófica la doctora cuenta que tuvo un paciente que tuvo mejoras sorprendentes. “El señor murió de igual forma, mas llevó mejor la enfermedad”, añade.

tres. Autismo
Puesto que el autismo está relacionado con la alta concentración de mercurio en el organismo, la terapia ortomolecular busca reducir esas concentraciones. Conforme la experiencia de Cáceres “nosotros hemos visto avances en los pequeños con autismo a los que tratamos. Las mamás te lo afirman, las mamás lo agradecen, te afirman mi hijo me escucha, me hace caso, hace más contacto visual”, comenta.

RIESGOS Y CRÍTICAS
No obstante, como existen fieles adeptos a esta práctica, asimismo hay quienes se oponen a este género de tratamiento, ¿Por qué razón? Pues la Medicina Ortomolecular no está basada en estudios científicos que verifiquen en un cien por ciento su eficacia y por el hecho de que hay muchas clínicas que la practican sin las cautelas precisas.

María Angélica Martín, Ingeniero en Comestibles, advierte que la terapia ortomolecular no ataca los aspectos macro de la nutrición, si no que va directo a lo micro. “No creo que la terapia ortomolecular bien aplicada sea mala, si no que se enfoca en un detalle y al final no es la solución al inconveniente. Es una terapia parche”, comenta.

Además de esto arguye que, por poner un ejemplo, no está comprobado el efecto de esta terapia en pequeños con autismo. Y sugiere agredir con una nutrición libre de azúcar y gluten, donde asimismo se han observado mejoras.

Aquí te contamos ciertos peligros, mitos y verdades, relacionados a esta terapia:

1. Hipervitaminosis
Conforme explica Martín, la terapia ortomolecular es peligrosa puesto que se puede generar una sobredosis de vitaminas, lo que puede gatillar otras enfermedades y dificultades.

Por su lado, la especialista en medicina ortomolecular explica que siendo un tratamiento endovenoso, hay que tomar cautelas ya antes de hacerlo. “Hay que medir las necesidades de cada organismo. En nuestra clínica no hacemos oxigenoterapia al ojo por ciento. Hay lugares en Chile donde se hace el ozono al ojo y eso no tiene ningún sentido, por el hecho de que eso te puede hacer daño”, aclara.

dos. No sirve para bajar de peso
Martín es acentuada en apuntar que para bajar de peso se precisa mudar el modo de vida. Tener una alimentación sana y de calidad, hacer ejercicios y estar siendo conscientes de lo que ingerimos. “No existen métodos mágicos”, aclara.

Por su lado, Cáceres apunta que “la terapia ortomolecular acelera el metabolismo, mas debe ir acompañado de una alimentación sana, que es la base de todo. Ya no hay que ver la dieta como algo para bajar de peso, hay que verla como algo para estar sano, para no tener diabetes, para no tener cáncer de colón. Como un tóxico más”. Y añade que no vale de nada someterse a sesiones de terapia ortomolecular si no se cuida la nutrición.

tres. Es un tratamiento enfocado en lo micro, no en lo macro
Para Martín, la terapia ortomolecular no es mala, mas tampoco es conveniente puesto que solo se enfoca en tratar lo micro. “No se puede utilizar como un tratamiento único. Aunque es verdad que en casos extremos el tratamiento ortomolecular puede ser útil como terapia opción alternativa, aconsejo que si se quiere invertir dinero en la salud, es mejor invertir en comida de mejor calidad y comer una dieta más armónica”.

Así es como la especialista en comestibles es acentuada en motivar a las personas a tener una alimentación sana, puesto que “está claro que una nutrición poco saludable genera desequilibro hormonal, inconvenientes de tiroides, acne y del ánimo, y para poder balancear esto creo que va alén de tener dos vitaminas aproximadamente. Tras combatir lo macro, entonces podemos agredir lo micro”. Y resalta la “visión simplista” de la terapia ortomolecular, donde se enfocan solo en micro elementos que pueden estar dañando nuestro organismo.

cuatro. Ningún estudio verifica la eficiencia de la Medicina Ortomolecular
Si bien existen múltiples investigaciones científicas presentadas en gacetas médicas, como el New England Journal of Medicine, donde se presenta la relación del mercurio con los infartos, no hay estudios que verifiquen su eficiencia a través de el procedimiento científico utilizado generalmente, lo que hace que muchos sean críticos de esta terapia. Solo se fundamenta en experiencias personales.

No obstante, Elisa Cáceres, quien aparte de ser médico internista tiene un titulado en alimentación, es apasionada en proteger esta terapia y nos cuenta que se comenzó a interesar en este tratamiento por el hecho de que es natural. Y hace una crítica a los médicos chilenos, en tanto que “son muy reluctantes a las cosas nuevas. Ni tan siquiera se dan el minuto de consultar o bien estudiarla. No saben lo que es y se apegan mucho a lo tradicional”, concluye.